Muchas afecciones médicas, como las que se enumeran a continuación, pueden afectar su salud auditiva. El tratamiento de estas y otras pérdidas auditivas a menudo puede conducir a una audición mejorada o restaurada. Si no se diagnostican ni se tratan, algunas afecciones pueden provocar una pérdida auditiva irreversible o sordera. Si sospecha que usted o su ser querido tiene un problema de audición, asegúrese de obtener un cuidado de la salud auditivo óptimo buscando un diagnóstico médico de un médico.

Infección en el oído

La causa más común de pérdida auditiva en los niños es la otitis media, el término médico para una infección del oído medio o inflamación del oído medio. Esta afección puede ocurrir en uno o ambos oídos y afecta principalmente a los niños debido a la forma de la trompa de Eustaquio joven (y es el diagnóstico más frecuente para los niños que visitan a un médico). Cuando no se diagnostica ni se trata, la otitis media puede provocar una infección del hueso mastoideo detrás de la oreja, la rotura del tímpano y la pérdida de audición. Si se trata adecuadamente, la pérdida de audición relacionada con la otitis media se puede aliviar.

Tinnitus

El tinnitus es el nombre médico que indica un zumbido en los oídos, que incluye ruidos que van desde rugidos fuertes hasta chasquidos, tarareos o zumbidos. La mayor parte del tinnitus proviene de daños en las terminaciones microscópicas del nervio auditivo en el oído interno. La salud de estas terminaciones nerviosas es importante para la audición aguda, y su lesión provoca pérdida de audición y, a menudo, tinnitus. El deterioro del nervio auditivo y el tinnitus también pueden ser un acompañamiento natural de la edad avanzada. La exposición a ruidos fuertes es probablemente la principal causa de daño auditivo del tinnitus en las personas más jóvenes. Los tratamientos médicos y los dispositivos de asistencia auditiva suelen ser útiles para quienes padecen esta afección.

Oreja de nadador

Una infección de las estructuras del oído externo causada cuando el agua queda atrapada en el canal auditivo y conduce a una colección de bacterias atrapadas se conoce como otitis externa o oído de nadador. En este ambiente cálido y húmedo, las bacterias se multiplican causando irritación e infección del canal auditivo. Aunque generalmente ocurre en nadadores, bañarse o ducharse también puede contribuir a esta infección común. En casos graves, el canal auditivo puede hincharse y cerrarse, lo que provoca una pérdida temporal de la audición y dificulta la administración de medicamentos.

Cerumen

El cerumen (también conocido como cerumen) es producido por glándulas especiales en la parte exterior del canal auditivo y está diseñado para atrapar el polvo y las partículas de suciedad evitando que lleguen al tímpano. Por lo general, la cera se acumula, se seca y luego se cae del oído por sí sola o se limpia. Una de las causas más comunes y de fácil tratamiento de la pérdida auditiva es la acumulación de cerumen. No se recomienda el uso de hisopos de algodón u otros objetos pequeños para eliminar el cerumen, ya que empuja el cerumen más profundamente en el oído, lo que aumenta la acumulación y afecta la audición. El exceso de cerumen puede ser una afección crónica que se trata mejor por un médico.

Enfermedad autoinmune del oído interno

La enfermedad autoinmune del oído interno (AIED) es una afección inflamatoria del oído interno. Ocurre cuando el sistema inmunológico del cuerpo ataca las células del oído interno que se confunden con un virus o una bacteria. El diagnóstico médico oportuno es fundamental para garantizar el pronóstico más favorable. Por lo tanto, es importante reconocer los síntomas de AIED: pérdida repentina de la audición en un oído que progresa rápidamente al segundo y pérdida continua de la audición durante semanas o meses, sensación de plenitud en el oído, vértigo y tinnitus. Los tratamientos incluyen principalmente medicamentos, pero los audífonos y los implantes cocleares son útiles para algunos.

Colesteatoma

Un colesteatoma es un crecimiento de la piel que ocurre en el oído medio detrás del tímpano. Esta afección generalmente es el resultado de una función deficiente de la trompa de Eustaquio junto con una infección del oído medio (otitis media), pero también puede estar presente al nacer. La afección es tratable, pero solo se puede diagnosticar mediante un examen médico. Con el tiempo, el colesteatoma no tratado puede provocar erosión ósea y propagación de la infección del oído a áreas localizadas como el oído interno y el cerebro. Si no se trata, puede ocurrir sordera, absceso cerebral, meningitis y muerte.

Tímpano perforado

Un tímpano perforado es un agujero o ruptura en el tímpano, una membrana delgada que separa el canal auditivo y el oído medio. Un tímpano perforado a menudo se acompaña de disminución de la audición y secreción ocasional con posible dolor. La cantidad de pérdida auditiva experimentada depende del grado y la ubicación de la perforación. A veces, un tímpano perforado sanará espontáneamente, otras veces es necesaria una cirugía para reparar el orificio. Pueden ocurrir problemas graves si el agua o las bacterias ingresan al oído medio a través del orificio. Un médico puede aconsejarle sobre la protección del oído del agua y las bacterias hasta que se repare el orificio.