La terapia fotodinámica (TFD), también denominada terapia con luz, fototerapia y fotoquimioterapia, existe desde hace unos 100 años y es un tipo de tratamiento del cáncer que utiliza la luz para destruir células anormales. Un fármaco especial llamado fotosensibilizador o agente fotosensibilizante circula por el torrente sanguíneo.

Una vez que el cáncer ha absorbido el agente, normalmente durante un período de unas horas a unos días, el tumor se expone a un tipo especial de luz que, junto con el agente, destruye las células cancerosas. Se cree que la TFD también potencialmente destruye los vasos sanguíneos que alimentan a los tumores y estimula el sistema inmunitario para que ataque las células cancerosas.

La TFD está actualmente aprobada por la Administración de Alimentos y Medicamentos para tratar o aliviar los síntomas del cáncer de esófago y la forma más común de cáncer de pulmón, llamado cáncer de pulmón de células no pequeñas. Están aprobados un puñado de fotosensibilizadores: el mejor para cada paciente depende de su diagnóstico específico.

La TFD es un tratamiento prometedor para ciertos tipos de tumores porque, en algunos casos, puede curar el cáncer. También es:

  • Menos invasivo y más rápido que la cirugía y otros procedimientos
  • Deja poca o ninguna cicatriz y no tiene efectos secundarios a largo plazo
  • Puede dirigirse con mucha precisión a las células cancerosas
  • Puede repetirse muchas veces en el mismo sitio

El tratamiento puede hacer que los ojos y la piel sean especialmente sensibles a la luz durante unas seis semanas.

Durante este tiempo, los pacientes deben evitar la luz solar directa y la luz interior brillante. Debido a que la base de la fototerapia es la luz, su tratamiento se limita a áreas sobre o justo debajo de la piel. Se están desarrollando métodos de fotosensibilización más nuevos y sofisticados.

Los efectos secundarios son raros, pero pueden incluir:

  • Ardor, hinchazón o dolor en o debajo de la superficie de la piel
  • Tos
  • Dificultad para tragar
  • Respiración dolorosa
  • Dificultad para respirar

Cómo prepararse para la TFD

Es importante seguir las instrucciones del médico para prepararse para la cirugía.

Qué esperar durante la TFD

Cada sesión de FTD es relativamente simple.

Los pacientes reciben un fármaco fotosensibilizador y esperan hasta que se haya concentrado en el tumor, o se les puede administrar el fármaco y regresar días después para el fototratamiento. El fototratamiento se realiza en una mesa de exploración y el paciente recibe medicamentos locales o generales para el control del dolor y la relajación. El tipo de luz apropiado se activa sobre el tumor en un haz fuerte y dirigido. El procedimiento dura tan solo unos minutos y hasta dos horas.

Recuperación de la TFD

La recuperación de la TFD suele ser bastante sencilla.

Los pacientes pueden experimentar algo de sequedad o ardor leve en la piel, pero otros efectos son poco comunes. Los productos para la piel suaves como la vaselina pueden ser útiles. Evite el sol, ya que la sensibilidad a la luz aumenta durante un tiempo después de la TFD; incluso unos pocos minutos de exposición al sol a veces pueden causar molestias. Siga las instrucciones de cualquier médico con respecto a los medicamentos y la actividad física, pero la mayoría de los pacientes pueden volver a sus actividades normales de inmediato.