Su médico usa un endoscopio (un tubo largo y flexible) con un pequeño transductor de ultrasonido en la punta para obtener imágenes de los ganglios linfáticos en la profundidad del pecho. Este instrumento se pasa al esófago. El transductor envía ondas sonoras de alta frecuencia a los órganos para crear imágenes detalladas de ellos. Debe evitar comer y beber durante al menos 6 horas antes del procedimiento, y estará sedado, por lo que no debe conducir ni regresar al trabajo durante 24 horas.